¿Cómo afectan las hormonas a la salud de tus senos?

Si bien la mayoría de las mujeres no empezamos a pensar en la salud de los senos entre los 20 y los 30 años, a menudo se convierte en un problema cuando llegamos a los 40 años. Los senos fibroquísticos, los quistes y el cáncer de mama comienzan a convertirse en preocupaciones a medida que envejecemos.

Desafortunadamente, pocas de nosotras tomamos las medidas necesarias (y sencillas) para mantener nuestros senos sanos y prevenir enfermedades.

Les compartiré algunos desequilibrios que pueden provocar cáncer de mama y otras enfermedades relacionadas con los senos y, lo más importante, lo que usted puede hacer al respecto.

Lo que aprenderás en este artículo.

• Cómo las hormonas afectan la salud de tus senos.

• Factores del estilo de vida para mantener tus senos sanos y felices.

• Alimentos para la salud de los senos.

• Cuándo ver a tu médico

• Cómo un autoexamen puede salvar tu vida

La salud de los senos y tus hormonas.

Los senos sanos dependen en gran medida de tu estado hormonal. Si tus hormonas están desequilibradas y tienes predominio de estrógeno, eres resistente a la insulina y tienes niveles altos de cortisol, esto eventualmente afectará la salud de tus senos. Tener una buena salud mamaria se trata realmente de tener una buena salud general.

4 Hormonas que afectan a tus senos:

• Estrógeno

• Cortisol.

• DHEA

• Insulina

El Estudio de Salud de las Enfermeras, encontró un fuerte vínculo entre el desequilibrio hormonal y el cáncer de mama. En este estudio, se midieron hormonas importantes en mujeres que habían pasado por la menopausia. Las hormonas estudiadas fueron estrógenos, hormonas androgénicas, DHEA, prolactina y factor de crecimiento similar a la insulina (IGF-1). Tan pronto como se elevaba una hormona, el riesgo de cáncer de mama se duplicaba. Cuando se elevaron varias, se triplicó. La hormona que tuvo el mayor impacto en el riesgo de cáncer de mama resultó ser el estrógeno. 

Si bien necesitamos estrógeno para funcionar, demasiado estrógeno del tipo incorrecto puede provocar cáncer. Por supuesto, el cáncer se encuentra en el extremo del espectro de enfermedades mamarias; no esperemos hasta llegar a ese punto. O, si ya has luchado contra el cáncer de mama, hagamos lo que podamos para mantenerla en remisión permanente.

Algunas enfermedades de los senos, como los bultos y los senos fibroquísticos, en realidad pueden ser signos tempranos de predominio de estrógenos.

Factores del estilo de vida para mantener tus senos sanos y felices.

1. Eliminar los xenoestrógenos tanto como sea posible.

Los xenoestrógenos son estrógenos “extraños” o falsos o compuestos que imitan al estrógeno y que alteran en gran medida nuestras hormonas. Cuando el cuerpo se encuentra con estos xenoestrógenos, actúa como si hubiera estado expuesto a niveles más altos de nuestros propios estrógenos producidos internamente. Esto provoca un caos hormonal.

¿Cómo nos exponemos a estos químicos? Se debe en gran medida a los productos que elegimos usar en nuestros día a día, como plásticos y limpiadores, en nuestro cuerpo, como productos para el cuidado de la piel y el pelo. Se esconden en los jabones para lavar la ropa, en las fragancias y en el maquillaje. Los encontrarás como BPA, parabenos y ftalatos, que pueden acumularse en el tejido mamario.

2. Haz ejercicio

Según el Instituto Nacional del Cáncer, se ha demostrado que la actividad física, como caminar o trotar, reduce el riesgo de cáncer de mama tanto en mujeres premenopáusicas como posmenopáusicas (un promedio de riesgo reducido del 12%). Las mujeres posmenopáusicas tuvieron un mayor beneficio protector general del ejercicio, pero hubo mejoras en ambos grupos.

3. Sé inteligente con los teléfonos inteligentes

Por favor, NO guardes tu teléfono celular en tu sostén. Los teléfonos móviles pueden provocar cambios negativos en los tejidos de nuestro cuerpo. 

4. Dale un respiro al sujetador

El sostén no es omnipresente en todo el mundo hoy en día, ni nunca fue natural en nuestra fisiología. Los sujetadores push-up y ajustados pueden reducir la circulación y el flujo linfático al tejido mamario, lo que potencialmente podría aumentar el riesgo de enfermedad. Sin embargo, en este momento, no hay ningún estudio que demuestre que los sujetadores sean dañinos. Pero, si simplemente pasas el día en casa (y no esperas compañía), tal vez dale un respiro al sostén. Todo el cuerpo necesita circulación y flujo linfático, incluidos los senos.

5. Come bien para tener unos senos sanos

Hay una serie de cambios que puedes realizar para promover un tejido mamario saludable:

Alimentos para la salud de los senos.

Algunos de los mejores alimentos para la salud de los senos son los que ayudan a reducir los niveles de "estrógeno sucio". Estas son verduras crucíferas o miembros de la familia Brassica, e incluyen repollo, brócoli, coliflor, col rizada, coles de Bruselas, berza, rábanos y rúcula. Las verduras crucíferas son ricas en una sustancia llamada DIM (diindolilmetano), que es clave en la desintoxicación del hígado, así como en la eliminación de metabolitos de estrógeno mutados. Esto, a su vez, ayuda a las mujeres a mantener un equilibrio saludable de estrógeno, progesterona y hormona tiroidea, lo cual es fundamental si desea equilibrar las hormonas de forma natural y tener senos sanos.

Las verduras crucíferas también pueden ayudarte a filtrar los metabolitos de estrógeno de tu cuerpo. Un estudio piloto publicado en la revista Nutrition and Cancer encontró que la suplementación con 108 mg de DIM por día aumentaba la 2-hidroxilación de los metabolitos urinarios de estrógeno en mujeres posmenopáusicas (de 50 a 70 años) que tenían antecedentes de cáncer de mama en etapa temprana.

Dado que estos subproductos de estrógeno pueden ser dañinos si continúan circulando en niveles altos, las mujeres que comen vegetales crucíferos pueden reducir su tendencia hacia el dominio de los estrógenos. La estabilización del estrógeno también puede ayudar a estabilizar otras hormonas importantes.

Aquí hay una lista de algunas verduras crucíferas que puede incluir en tu dieta para promover un tejido mamario saludable:

• Rúgula 

• Col china

• Brócoli y brotes de brócoli.

• Coles de Bruselas

• Repollo.

• Coliflor.

• Hojas de col.

• Rábano picante.

• col rizada.

• Colinabo

• Hojas de mostaza.

• Rábanos.

Un consejo importante: los brotes de brócoli son la fuente más rica de sulforafano, que ayuda al cuerpo a desintoxicarse, reduce la inflamación y reduce el riesgo de desarrollar cáncer de mama.

Plantas ricas en estrógenos.

Incluso si estás lidiando con el predominio de estrógenos, aún puedes mantener estrógenos suaves de origen vegetal en tu dieta. Los necesitas para tener senos sanos, figura con curvas, períodos, cabello y piel brillantes, etc. El problema no es tener estrógeno, sino no poder descomponerlo. Aquí hay algunos alimentos saludables y ricos en fitoestrógenos que puedes disfrutar para la salud de los senos:

• Naranjas

• Maca 

• Linaza

• Brócoli

• Zanahorias

• Aguacates

• Frijoles o lentejas.

• Ñame o batatas.

Alimentos ricos en yodo.

El yodo desintoxica nuestros estrógenos "sucios" y desempeña un papel clave en la salud de los senos y el cerebro. Tenemos receptores de yodo en los senos, la tiroides, el cerebro, las glándulas suprarrenales y los ovarios, por lo que una deficiencia de yodo compromete los niveles de energía, la cognición y la función inmune y contribuye a la aparición de bultos en los senos y cáncer de mama. No puedo decirles cuántas mujeres recuperan energía y agudeza mental después de comer más algas (las ponen en un caldo de huesos). 

Elija productos limpios, libres de toxinas y cosechados en Estados Unidos. No compre algas de China. Las algas son una fuente fantástica de yodo y se pueden encontrar en:

• Algas marinas (kombu), tienen la mayor cantidad de yodo.

• Hijiki

• Wakame

• Nori, bajo en yodo.

¿Qué puedes hacer con las algas? Agrega algas secas, hijiki o wakame a caldos o sopas de huesos, o úsalos para hacer ensaladas.

Cuidado con la ensalada de algas de color verde brillante. Ese color es falso. Las algas naturales son de un color verde sucio.

Precaución: No consumas yodo en grandes cantidades si tienes Hashimoto y anticuerpos TPO elevados.

Alimentos y bebidas ricos en antioxidantes o polifenoles.

Los polifenoles son un grupo de más de 500 fitoquímicos que son micronutrientes naturales en las plantas. Son de naturaleza altamente medicinal y muchas empresas de suplementos están sacando provecho de ello.

Algunos de los polifenoles incluyen quercetina (que se encuentra en las manzanas), catequinas (en el chocolate amargo y las cerezas), lignanos (en las semillas de lino), resveratrol (en los pistachos, el vino y los arándanos) y la curcumina (en la cúrcuma).

Algunos alimentos excelentes ricos en polifenoles para la salud de los senos incluyen:

• Granada (ácido elágico)

• Frambuesas (ácido elágico)

• Arándanos

• Cebollas (quercetina)

• Cúrcuma (curcumina)

• Té verde (catequinas)

• Uvas (resveratrol)

Suplementos para la salud mamaria

Hay algunos suplementos que puedes probar y que pueden marcar una gran diferencia, especialmente si los combinas con una buena dieta.

Magnesio.

¿Alguna vez has notado que tus senos se vuelven más sensibles después de un período estresante? Esto se debe a que el estrés le roba al cuerpo muchos nutrientes, incluido el magnesio. Ciertamente, lo he experimentado en mi propio cuerpo. La mayoría de las mujeres tienen niveles crónicamente bajos de magnesio (esta es también la razón por la que anhelamos el chocolate; el cacao tiene un alto contenido de magnesio) y creo que es un mineral muy subestimado. Comienza con 300 mg de magnesio por día y ve aumentando hasta tener soltura cuando vayas al baño. Es posible que necesites hasta 1200 mg por día para reponerlos y luego disminuirlos hasta que tu evacuación intestinal vuelvan a la normalidad.

DIM, sulforafano y D-glucarato de calcio.

DIM ha ganado mucha atención como el "destructor de estrógenos" que puede ayudar con el dominio de los estrógenos. Es solo parcialmente cierto, porque también es una visión incompleta del dominio del estrógeno. El estrógeno se elimina en varias etapas del cuerpo y DIM ayuda con la desintoxicación del hígado de Fase I. La mayoría de las mujeres también necesitan apoyo en la Fase II de desintoxicación del hígado; aquí es donde entran en juego el sulforafano (derivado de los brotes de brócoli, en forma muy concentrada) y el d-glucarato de calcio.

Siento que el sulforafano es otra sustancia subestimada (pero costosa): no solo elimina los estrógenos, sino que también activa la vía NrF2 (reduciendo drásticamente la inflamación) y literalmente mata las células madre cancerosas. El d-glucarato de calcio apoya la vía hepática de glucoridinación, que también participa en gran medida en la eliminación de estrógenos. 

Progesterona.

La progesterona compensa el trabajo del estrógeno: son dos compañeros perfectos, pero necesitan estar en equilibrio. A medida que envejecemos, tanto el estrógeno como la progesterona disminuyen, pero muchas veces la progesterona disminuye mucho más, lo que hace que el estrógeno sea demasiado alto y potencialmente dañino. Los niveles bajos de progesterona podrían causar predominio de estrógenos, la principal causa de senos abultados y fibroquísticos. Puedes intentar agregar progesterona a tu protocolo (lo más probable es que muchos otros de tus síntomas mejoren, como el sueño o la ansiedad).

¿Cuándo ver a tu médico?

Los senos son dinámicos y cambian según la época del mes, la edad y el estado del embarazo. Sin embargo, hay ciertas cosas a tener en cuenta que son señales de alerta y pueden requerir una visita al médico.

• Un bulto o engrosamiento en el seno.

• Un cambio en el tamaño, la forma o la apariencia del seno.

• Hoyuelos, picaduras o enrojecimiento de la piel del seno.

• Un pezón recién invertido

• Cambios en el área pigmentada que rodea el pezón (areola), como descamación, descamación, formación de costras o descamación.

• Dolor de mama continuo o que empeora.

• Cambios en los senos que persisten después de su período.

• Un cambio en el tamaño o la forma de un bulto en el seno ya evaluado.

Es una buena idea estar familiarizada con el aspecto y la sensación de cada seno para poder detectar cambios. Los autoexámenes realizados de manera adecuada y constante pueden ser una excelente manera de asegurarse de que todo permanezca normal.

De hecho, aproximadamente el 50% de los casos de cáncer de mama en mujeres mayores de 50 años y el 71% de los casos de cáncer de mama en mujeres de 49 años o menos, se detectan por las propias mujeres, en lugar de mediante pruebas.

OJO, Un estudio canadiense de 25 años de duración que observó a 90.000 mujeres encontró que “la mamografía anual en mujeres de 40 a 59 años no reduce la mortalidad por cáncer de mama más allá de la de un examen físico”.

Una vez al año puede que no sea suficiente. Por lo tanto, los autoexámenes son tan efectivos como las mamografías sin exposición a la radiación y sin posibles daños al ADN del tejido, lo que puede aumentar el riesgo de cáncer, nada menos.