La Vitamina B1: El Vínculo Olvidado entre el Colesterol Alto y el Hipotiroidismo

Si te han dicho que la única solución para tu colesterol alto es tomar estatinas, o que tu tiroides está “perezosa” y necesitas medicación de por vida, podrías estar viendo solo una parte del panorama. Muchas mujeres llegan a consulta, sintiéndose desconectadas, con niebla mental, agotadas y frustradas, a pesar de “hacer todo bien”.

La clave podría estar en una vitamina olvidada: la vitamina B1 (tiamina).

¿Por qué es tan importante la vitamina B1?

La vitamina B1 es esencial para funciones críticas del cuerpo, entre ellas:

• La producción de energía celular.

• El metabolismo de carbohidratos.

• La salud del sistema nervioso.

• La comunicación hormonal entre la tiroides, el hígado y el sistema digestivo.

Cuando hay deficiencia de B1, el cuerpo entra en una especie de “modo de emergencia” donde muchas funciones comienzan a ralentizarse o descoordinarse.

Lo que podrías sentir si te falta B1

• Cansancio persistente, incluso después de dormir bien.

• Niebla mental o dificultad para concentrarte.

• Niveles de colesterol que no bajan con dieta ni ejercicio.

• Palpitaciones o sensación de ansiedad inexplicable.

• Digestiones lentas o inflamación.

Cómo la B1 ayuda a reducir el colesterol

La B1 mejora la activación de las hormonas tiroideas, lo que reduce el colesterol LDL de forma natural.

Si tienes hipotiroidismo, la B1 es necesaria para:

• Activar la T3 dentro de las células.

• Mejorar la producción de ATP mitocondrial (clave para la función tiroidea).

• Reducir el patrón de “hipotiroidismo funcional”, donde tus análisis salen “normales” pero tus células funcionan mal.

Cuando mejora la actividad de la T3:

• Los receptores de LDL en el hígado se activan.

• Tu hígado elimina el LDL más rápido.

• El colesterol disminuye, incluso sin cambiar la dieta.

Esta es una de las formas más poderosas en que la B1 puede ayudarte.

No todas las B1 son iguales: las formas que realmente funcionan

La forma tradicional (tiamina HCL) es útil, pero muchas personas con problemas digestivos, inflamación o hipotiroidismo tienen dificultades para absorberla. Por eso se recomiendan formas más bioactivas:

• Benfotiamina: forma liposoluble que mejora la absorción en tejidos y cruza barreras celulares con facilidad. Ideal para casos de resistencia a la insulina, inflamación y fatiga crónica.

• Tiamina Tetrahydrofurfuryl Disulfide (TTFD o Alitiamina): altamente biodisponible, recomendada para personas con tiroides lenta o problemas hepáticos.

Cómo tomar vitamina B1 de forma efectiva

• Dosis recomendadas:

  • Benfotiamina: 150–300 mg/día

  • TTFD: 50–200 mg/día (iniciar con dosis bajas)

• Momento ideal: en la mañana o con la primera comida del día.

• Acompañantes ideales:

  • Magnesio (cofactor para activar la B1)

  • Vitaminas B2 y B6 si tomas suplementos del complejo B a largo plazo

  • Cobre y alimentos ricos en enzimas si hay alteraciones en el metabolismo del hierro

• Evita combinar con:

  • Café o té (interfieren en su absorción)

  • Suplementos de hierro (tomarlos separados por al menos 2 horas)

Razones comunes de deficiencia (aunque comas sano)

• Estrés crónico (agota las reservas de B1).

• Dietas altas en carbohidratos refinados.

• Medicamentos como diuréticos, antibióticos o antiácidos.

• Consumo frecuente de café, alcohol o bebidas energéticas.

Contraindicaciones o precauciones

Aunque la B1 es generalmente segura, ten en cuenta:

• Embarazo o lactancia: consulta siempre con tu médico.

• Sensibilidad al azufre: la forma TTFD contiene compuestos sulfurados.

• Hígado comprometido o consumo crónico de alcohol: puede requerir formas específicas y supervisión profesional.

• Interacciones con medicamentos: especialmente quimioterapia, anticonvulsivos o algunos antihipertensivos.

Lo que muchas mujeres reportan al corregir su deficiencia

• Mayor claridad mental.

• Mejor estado de ánimo y regulación emocional.

• Energía sostenida durante el día.

• Reducción de niveles de colesterol.

• Mejora en los síntomas de tiroides lenta.

• Mayor tolerancia al ejercicio y mejor recuperación.

Conclusión

La vitamina B1 podría ser la pieza que falta en el rompecabezas de tu salud hormonal y metabólica. En lugar de acumular más suplementos o buscar soluciones sintomáticas, considera apoyar las bases del metabolismo celular.

Tu cuerpo no está roto. Solo necesita las herramientas correctas para volver al equilibrio.

¿No sabes por dónde empezar o qué tipo de B1 elegir? Escríbeme o agenda una consulta. En Ovario Mío te ayudamos a crear una estrategia personalizada para recuperar tu energía y bienestar desde la raíz.