Cómo prepararte para la perimenopausia desde ahora

Aunque la menopausia se define de forma bastante clara —12 meses seguidos sin menstruar—, lo que ocurre antes de que llegue ese momento es todo un misterio. La famosa "perimenopausia", esa etapa que nos prepara (o nos sacude) antes del gran cambio hormonal, puede ser difícil de identificar… pero profundamente transformadora.

Lo curioso es que, a pesar de durar meses o incluso años y venir acompañada de un cóctel de síntomas físicos y emocionales, sigue siendo una etapa poco hablada, poco comprendida y muchas veces malinterpretada. No es raro que nos tome por sorpresa, que pensemos que estamos "raras", sin saber que lo que pasa tiene nombre y explicación.

Y aunque solemos pensar en prepararnos para la menopausia como un “algún día”, la verdad es que el momento de empezar a prepararse es AHORA. Entender lo que está por venir, reconocer las señales del cuerpo y aprender cómo acompañarlo con conciencia y amor puede marcar toda la diferencia.

¿Qué síntomas buscar durante la perimenopausia?

Es importante recordar que los síntomas de la perimenopausia varían de una mujer a otra. Sin embargo, algunos síntomas son bastante comunes:

• Cambios en la menstruación

• Problemas de sueño e insomnio

• Cambios de humor

• Aumento de peso o cambios en la distribución de grasa

• Piel y pelo más secos y finos

• Uñas quebradizas

• Dolor en las articulaciones

• Problemas de memoria

  
  

  Lo que debes saber: Según The Menopause Society, la irregularidad menstrual es el síntoma más común durante la perimenopausia, y en muchos casos puede ser el único. Pero que tu ciclo cambie no significa que la fertilidad haya desaparecido por completo. Todavía puedes quedar embarazada en esta etapa, aunque no estés ovulando todos los meses.

  
  

Muchas mujeres creen que su edad es sinónimo de infertilidad y se sorprenden al descubrir que aún pueden concebir. Si has utilizado la regularidad de tu ciclo como forma de planificación, este es el momento de prestarle especial atención a esos cambios y seguir usando métodos anticonceptivos si no deseas un embarazo. La recomendación general es mantener la protección hasta haber pasado 12 meses consecutivos sin menstruar.

Y si todavía menstruas y no estás usando anticonceptivos hormonales, tu médico puede darte una prueba de FSH (hormona folículoestimulante). Esta prueba ayuda a identificar si estás en fase perimenopáusica o si ya has entrado en la menopausia.

6 cosas que puedes hacer desde ya para prepararte

Aquí te compartimos seis pasos prácticos para comenzar hoy mismo:

1. Lleva un registro de tu ciclo

Incluso si toda la vida tu regla fue puntual, la perimenopausia puede traer cambios inesperados: ciclos más cortos o más largos, sangrados más abundantes o manchados irregulares. Empieza a registrar:

• Cuándo llega tu menstruación y cuánto dura

• Síntomas físicos y emocionales (dolor, insomnio, irritabilidad, ansiedad, etc.)

• Cambios en tu energía, digestión, sueño o piel

  
  

Puedes usar una app o simplemente una agenda o calendario. Esta información será valiosa para tu médico si necesitas hacer una evaluación más profunda.

2. Crea una rutina de sueño

El insomnio es uno de los síntomas más comunes (y agotadores) de esta etapa. Afortunadamente, puedes empezar a proteger tu descanso con pequeñas acciones diarias:

• Evita pantallas al menos una hora antes de dormir

• Limita cafeína, alcohol y líquidos por la noche

• Crea un entorno propicio para dormir: sin trabajo, sin ruido, sin luces fuertes

• Considera el uso de progesterona tópica (en Ovario Mío te damos más orientación con relación a esto)

  
  

  El descanso no es un lujo, es parte del tratamiento hormonal natural.

  
  

3. Practica estrategias de regulación emocional

Los cambios hormonales afectan también tu sistema nervioso. Puedes sentirte más irritable, más ansiosa, más emocional... y eso está bien. No es debilidad, es fisiología. Herramientas que pueden ayudarte:

• Respiración profunda y pausas conscientes durante el día

• Caminar al aire libre, especialmente en contacto con la naturaleza

• Meditación guiada o ejercicios de mindfulness

• Conversaciones abiertas con tus seres queridos para que sepan cómo acompañarte

  
  

No se trata de evitar las emociones, sino de tener recursos para atravesarlas con más calma y menos juicio.

4. Revisa tu alimentación y movimiento

Durante esta etapa, el metabolismo cambia y muchas mujeres notan que su cuerpo responde diferente, aunque no hayan cambiado nada en su rutina.

Recomendaciones clave:

• Aumenta tu ingesta de proteína en cada comida (ayuda a preservar masa muscular y saciedad)

• Incluye omega-3 (pescado azul, chía, linaza) para reducir inflamación

• Agrega más fibra y calcio (vegetales verdes, frutos secos, semillas)

• Integra ejercicios de fuerza y movimiento consciente (como pesas, pilates, yoga, caminar)

  
  

El objetivo no es bajar de peso, sino sentirte fuerte y vital desde adentro hacia afuera.

5. Evalúa si necesitas suplementos

A veces, por más saludable que comamos, no alcanzamos a cubrir todas las necesidades de esta etapa. Hay suplementos que pueden ser de gran apoyo si están bien indicados. Algunos recomendados por especialistas:

• Probióticos → para salud digestiva e inmunidad

• Vitamina D y B12 → para energía, ánimo y salud ósea

• Multivitamínico de base alimentaria → para cubrir vacíos nutricionales

  
  

Como siempre, antes de incorporar cualquier suplemento, es ideal hacerte una evaluación y conversar con un profesional. Si no sabes qué suplementos tomar, en Ovario Mío te damos guía.

6. Conversa con las mujeres de tu familia

Nuestra historia hormonal también se hereda. Pregunta a tu mamá, tías o abuelas cómo vivieron su menopausia. ¿A qué edad empezó? ¿Qué síntomas tuvieron? ¿Cómo se sintieron?

Estas conversaciones no solo te ayudarán a anticipar lo que podrías vivir tú, sino que también sanarán vínculos, abrirán diálogos y construirán comunidad.

Conocimiento = Poder (y autocuidado)

La perimenopausia no es el fin de nada. Es un proceso natural, poderoso, lleno de oportunidades para reconectar contigo misma. Saber qué esperar, cómo cuidarte y cómo pedir apoyo puede transformar por completo tu experiencia.

Como siempre decimos en Ovario Mío:Tu cuerpo no está fallando, está evolucionando. Y tú mereces acompañarlo con información, compasión y confianza.